Dificultad:
★★★
Tiempo de Preparación Total:
1 hora
Escalivar al forn, también conocida como escalivada a la brasa, es una deliciosa y tradicional receta de la cocina catalana que se caracteriza por su sabor ahumado y su textura suave y reconfortante. Este plato, típico de la región mediterránea, consiste en una exquisita mezcla de verduras asadas, como pimientos, berenjenas, cebollas y tomates, que se cocinan lentamente en el horno o a la brasa.
Delicioso paso a paso para preparar una auténtica escalivada
Ingredientes:
- 3 berenjenas
- 3 pimientos rojos
- 2 cebollas
- 4 tomates maduros
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
Tiempo de preparación: 1 hora
Dificultad: 3 (media)
Cómo preparar una auténtica escalivada paso a paso
Paso 1: Escalivar al forn o asar a la brasa
Para comenzar a preparar una deliciosa escalivada, el primer paso es escoger tus vegetales favoritos para asar. Puedes utilizar berenjenas, pimientos, cebollas, o lo que más te guste. Precalienta el horno a una temperatura alta o enciende la parrilla para asar a la brasa. Coloca las verduras en una bandeja apta para el horno o directamente sobre la parrilla y deja que se cocinen lentamente hasta que estén tiernas y la piel esté ligeramente quemada.
Paso 2: Preparación de la albergínia escalivada
Una de las estrellas de la escalivada es la albergínia, así que asegúrate de asarla adecuadamente para lograr el sabor característico de este plato. Debes pinchar la albergínia varias veces con un tenedor para evitar que explote al cocinarla. Colócala en el horno o en la parrilla y gírala ocasionalmente para que se ase de manera uniforme. Una vez que la piel esté arrugada y la pulpa esté suave, retírala del fuego y deja que se enfríe antes de pelarla y cortarla en tiras gruesas.
Paso 3: Servir la escalivada fría o caliente
La versatilidad de la escalivada radica en que puede ser disfrutada tanto fría como caliente, dependiendo de tus preferencias. Si prefieres comerla caliente, puedes servir las verduras recién asadas directamente del horno o la parrilla, sazonadas con un chorrito de aceite de oliva y sal. Si te inclinas por una versión fría, deja que las verduras se enfríen por completo antes de pelarlas y cortarlas, y sírvelas en un plato con un toque de vinagre y perejil fresco.
Paso 4: Acompañando la escalivada
Para complementar el exquisito sabor de la escalivada, puedes acompañarla con unas rebanadas de pan crujiente, una tabla de embutidos, quesos variados o incluso un plato de arroz blanco. La escalivada es perfecta para servir como entrante, guarnición o incluso como plato principal en una comida ligera y saludable. ¡Disfruta de esta receta tradicional llena de sabores mediterráneos!
Delicioso paso a paso para preparar una auténtica escalivada
Para comenzar, vamos a preparar la escalivada al forn, lo que significa asar las verduras en el horno. Precalienta el horno a una temperatura alta y coloca las berenjenas, los pimientos y las cebollas en una bandeja apta para horno. Rocía un poco de aceite de oliva por encima y asegúrate de que estén bien cubiertas.
Una vez estén doradas y tiernas, retira las verduras del horno y déjalas enfriar. Luego, con cuidado, pela la piel de las berenjenas y los pimientos. Corta las verduras en tiras finas y colócalas en un recipiente. Recuerda que el toque del horno les dará un sabor ahumado único a la escalivada.
A continuación, vamos a disfrutar de una escalivada a la brasa. Enciende la parrilla y asa las verduras directamente sobre las brasas. Gira las berenjenas, los pimientos y las cebollas varias veces para que se cocinen de manera uniforme y se impregnen del delicioso aroma ahumado de la brasa. La técnica de la brasa resalta los sabores naturales de las verduras.
Una vez las verduras estén bien asadas, retíralas de la parrilla y deja que se enfríen un poco. Luego, pela la piel de las berenjenas y los pimientos, y córtalos en tiras. Coloca todas las verduras asadas en un plato y agrégales un chorrito de aceite de oliva virgen extra y sal al gusto. ¡Listo, tu escalivada a la brasa está lista para degustar!
La escalivada es un plato versátil que puede disfrutarse frío o caliente. Para una experiencia refrescante, sírvela fría acompañada de un buen trozo de pan crujiente. Si prefieres saborearla caliente, caliéntala en el horno antes de servirla. Sea como sea, la escalivada es una deliciosa manera de disfrutar de las verduras de temporada en todo su esplendor. ¡Disfruta de esta receta llena de sabor y tradición!
Delicioso paso a paso para preparar una auténtica escalivada
Después de disfrutar del espectáculo de colores y olores que se despliegan en cada etapa de la elaboración de una auténtica escalivada, solo queda deleitarse con su sabor único y reconfortante. Una vez que los vegetales han sido asados a la perfección, con su piel chisporroteante y su interior tierno y aromático, es momento de dar el toque final a este plato tradicional de la cocina mediterránea.
Al servir la escalivada, puedes optar por presentarla fría o caliente, según tus preferencias o la ocasión. Si decides degustarla caliente, acompáñala con un buen trozo de pan tostado y un poco de queso de cabra, para potenciar aún más sus sabores. Por otro lado, si prefieres disfrutarla fría, puedes maridarla con una copa de vino blanco fresco y unas aceitunas, creando así una combinación perfecta para los días calurosos de verano.
Sea como sea que decidas servir y acompañar tu escalivada, lo importante es saborear cada bocado con calma y apreciar la cuidadosa preparación que hay detrás de este plato tan sencillo pero lleno de historia y tradición. Desde su origen humilde en las cocinas rurales hasta su presencia en las mesas más refinadas, la escalivada sigue siendo un símbolo de la gastronomía mediterránea que conquista paladares en todo el mundo.