¡Prepara tu propio desayuno crujiente con esta receta de granola casera!

Dificultad:
★★

Tiempo de Preparación Total:
30 minutos

¡Prepara tu propio desayuno crujiente con esta receta de granola casera! Si eres de los que disfrutan de un desayuno delicioso y saludable, esta receta de avena crujiente es perfecta para ti. Imagina despertarte con el irresistible aroma a canela y nueces tostadas llenando tu cocina y una deliciosa mezcla de copos de avena, frutos secos y miel crujientes esperándote en el desayuno. Con esta receta, podrás crear tu propia granola casera, llena de sabor y textura, y lo mejor de todo, ¡sabes exactamente qué ingredientes estás consumiendo! Sigue leyendo para descubrir cómo preparar este delicioso manjar en la comodidad de tu hogar.

Ingredientes:

  • 3 tazas de avena
  • 1 taza de frutos secos al gusto nueces, almendras, avellanas, etc.
  • 1/2 taza de semillas de calabaza
  • 1/2 taza de semillas de girasol
  • 1/2 taza de miel o sirope de agave
  • 1/4 taza de aceite de coco derretido
  • 1 cucharadita de canela en polvo
  • 1/2 taza de frutas deshidratadas arándanos, pasas, etc.

Tiempo de preparación:

15 minutos de preparación, 30 minutos de cocción

Dificultad:

2 Fácil

Preparación de la Avena Crujiente

Para comenzar a preparar tu deliciosa avena crujiente, primero precalienta el horno a 170°C. Mientras el horno se calienta, coloca en un recipiente grande la avena, las nueces picadas, las semillas de calabaza y el coco rallado. Mezcla todos los ingredientes secos con una cuchara de palo para que se distribuyan de manera uniforme.

Luego, en una olla pequeña, calienta el aceite de coco y la miel a fuego medio-bajo, revolviendo hasta que se integren por completo. Una vez que la mezcla esté homogénea, retírala del fuego y viértela sobre los ingredientes secos. Con la ayuda de la cuchara, asegúrate de que todos los ingredientes estén bien cubiertos con la mezcla de aceite de coco y miel.

Horneado y preparación final:

Transfiere la mezcla a una bandeja para hornear previamente forrada con papel encerado. Extiende la mezcla en una capa uniforme para obtener una cocción pareja. Lleva la bandeja al horno precalentado y hornea por aproximadamente 25-30 minutos o hasta que la granola esté dorada y crujiente. Recuerda mezclar la granola ocasionalmente para que se dore de manera pareja.

Una vez que la granola esté lista, sácala del horno y déjala enfriar por completo. La granola casera estará lista para disfrutar. Disfruta de esta avena crujiente con yogur, frutas frescas o simplemente como snack. ¡Verás lo fácil y deliciosa que es esta receta! ¡Atrévete a prepararla y deleita a tu paladar con esta maravillosa combinación de sabores y texturas!

Cómo hacer avena crujiente casera

Paso 1: Preparar los ingredientes

Antes de comenzar a hacer nuestra deliciosa avena crujiente, es importante tener todos los ingredientes a mano. Necesitarás avena, miel, aceite de coco, nueces, almendras, y pasas. ¡Asegúrate de tener todo listo antes de comenzar!

Paso 2: Mezclar los ingredientes secos

En un bol grande, combina la avena, las nueces y almendras troceadas. Mezcla todo muy bien para que los ingredientes secos se distribuyan de manera uniforme. Este paso es clave para lograr una granola casera perfectamente crujiente y sabrosa.

Paso 3: Preparar la mezcla líquida

En una cacerola pequeña, calienta el aceite de coco y la miel a fuego lento. Revuelve constantemente hasta que la mezcla esté suave y bien integrada. La combinación de miel y aceite de coco le dará a nuestra avena crujiente casera ese toque dulce y crujiente tan característico.

Paso 4: Hornear y disfrutar

Una vez que la mezcla líquida esté lista, viértela sobre los ingredientes secos y revuelve para asegurarte de que toda la avena esté bien impregnada. Extiende la mezcla en una bandeja para hornear y métela en el horno precalentado. Hornea hasta que la avena esté dorada y crujiente. ¡Disfruta de tu avena crujiente casera en el desayuno o como snack en cualquier momento del día!

¡Esta avena crujiente casera es simplemente deliciosa! Te aseguro que una vez que pruebes esta receta, no querrás volver a comprar granola en la tienda. ¡Despierta tus sentidos con el crujir de cada bocado y disfruta de la combinación perfecta de sabores y texturas en tu desayuno!

Conclusión:

En resumen, preparar tu propia granola casera es una experiencia deliciosa y gratificante. Desde seleccionar cuidadosamente los ingredientes hasta mezclarlos con tus manos y disfrutar del aroma que se esparce por la cocina, cada paso es un verdadero acto de amor hacia tu cuerpo y tu bienestar. Además, la versatilidad de la granola casera te permite personalizarla a tu gusto, añadiendo tus frutos secos, semillas y especias favoritas.

Al despertar por la mañana y servirte un tazón de leche con esta granola crujiente recién hecha, estarás dando inicio a tu día con energía, vitalidad y un sabor increíble que solo los ingredientes naturales pueden brindar. No solo satisfarás tu paladar, sino que también alimentarás tu cuerpo con nutrientes esenciales que lo mantendrán en óptimas condiciones a lo largo del día.

Entonces, ¿por qué conformarte con granolas comerciales cuando puedes deleitarte con una versión casera que refleja tu cuidado y compromiso con tu alimentación? Anímate a preparar tu propia granola y disfruta de cada bocado crujiente cargado de bondad y sabor incomparables. ¡Tu desayuno nunca volverá a ser el mismo!

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